Nosotros tenemos la alegría de nuestras alegrías y también tenemos la alegría de nuestros dolores. Porque no nos interesa la vida indolora que la civilización del consumo vende en los supermercados. Y estamos orgullosos del precio de tanto dolor que por tanto amor pagamos. Nosotros tenemos la alegría de nuestros errores, tropezones que muestran la pasión de andar y el amor al camino. Tenemos la alegría de nuestras derrotas, porque la lucha por la justicia y la belleza vale la pena también cuando se pierde. Y sobre todo, tenemos la alegría de nuestras esperanzas en plena moda del desencanto, cuando el desencanto se ha convertido en articulo de consumo masivo y universal. Nosotros seguimos creyendo en los asombrosos poderes del abrazo humano. Eduardo Galeano.

miércoles, 17 de abril de 2013

Bolivia hermana, segunda parte.


Hemos decidido afrontar la angustia de la hoja en blanco. Paso demasiado tiempo desde nuestras últimas noticias y recapitular va a ser desenmarañar un ovillo de recuerdos y experiencias.
Caímos en el circulo vicioso en el que cada día pasado hacia más complicado el momento de poder resumir lo que fuimos viviendo. Quizás este post sea un monigote sin forma definida y dibujado con el codo, pero haremos el intento...
A nuestros fieles lectores que se preocuparon por nuestra ausencia, sepan que nada malo nos paso en estos meses, solo que el viaje mismo nos mantuvo tan entretenidos e hipnotizados que el tiempo para dedicarle a la pantalla siempre quedaba como ultimo orejón del tarro.
Otra razón de este lapso silencioso se debe a que para nosotros la velocidad a la que corre el mundo ya no nos pertenece, y más que nada con lo que refleja nuestro viaje, como es este blog, no queremos hacerlo obligados ni presionados, si no que sea el espejo mas fiel de la sensibilidad y las emociones que nos va causando esta experiencia de vida.
El blog va a serguir su curso, fluyendo como nosotros, a veces más rápido y a veces como ahora, en cámara lenta…
En una antigua pulperìa de Machacamarca


Oruro, un show de color y alcohol. 
Sin siquiera planearlo febrero nos encontró en la ciudad de Oruro, cuna del carnaval boliviano. Cuando veíamos que se acercaba la fecha y que cada vez nos aproximábamos más a esta ciudad, entramos en la disyuntiva de quedarnos al mega-evento o seguir de largo a pagos más tranquilos.
Entre idas y vueltas antes de recurrir a tirar la moneda del azar, La Gorda cansada de tanta indefinición tomo la decisión por si sola sin pedir opiniones. Dijo:- “nos quedamos, y además de eso me van a tener que hacer ver la dirección, porque ya me duelen todos los huesos”.
Ok, le dijimos, y acto seguido pasamos 10 días asentando campamento en la puerta del mecánico.
Fue así, como mientras Gorda era reparada, fuimos testigos del gran show que cada año se da en Oruro. La cantidad de habitantes se duplica en estos días en los cuales gente de todo el mundo llega para ver un despliegue que, dicen, compite con el maior do mundo, en Rio de Janeiro.








La Morenada en todo su esplendor


Cualquier similutud con Flor de la V es pura coincidencia...


Es innegable que el carnaval es una atracción que debilita hasta el alma mas dura, el caleidoscopio de color de los trajes, la música y el aire de fiesta de estos días es difícil de evadir, pero igual de cierto es que a toda esta alegría le hace sombra el obvio trasfondo del negocio y los intereses, por sobre todo de las empresas cerveceras que llenan sus bolsillos con un abrir y cerrar de ojos. Caminar por las calles de Oruro en estos días era un desfile de comparsas y de ebrios a la vuelta de cada esquina.





Además de poder contar en primera persona lo que fueron estos días de locura carnavalera, fuimos adoptados por la gente del barrio, que nos mimo y nos dio cobijo durante el tiempo que estuvimos parando allí. Gracias a todos ellos y en especial a Aron y su familia por la ayuda que nos dieron.
Gorda en el service
La troupe de Oruro, con Santi, Lana, Aron y su familia















Hacia La Paz, la historia de la gran metrópolis y un teléfono.

Teníamos terror de llegar a La Paz, estábamos llenos de advertencias por sus supuestas calles empinadas, peligrosas e inseguras.
Junto con Lana Santi y Oliverio ya estábamos cumpliendo casi dos meses de viaje en caravana. La Paz seria el escenario de la despedida donde cada uno seguiría su camino.
Saltando en el tiempo podemos contar que esa fue solo la primer despedida, ya que una semana después el destino nos volvió a unir para seguir camino juntos hasta algún pueblo del Perú.

La no-despedida de La Paz



Finalmente decidimos hacer base en el estacionamiento del Aeropuerto del Alto de La Paz, donde no teníamos que correr el riesgo de subir y bajar empinadísimas calles con transito. Para los que no conocen La Paz, esta se divide en varios barrios, pero básicamente en dos grandes zonas, El Alto y la parte mas céntrica de la ciudad que queda literalmente en una olla enorme circundada por picos altisimos, entre ellos el imponente nevado de Illimani. Este paisaje surrealista, hace a La Paz una de las ciudades más extravagantes que hayamos conocido.




La Paz vista desde un piso 16, de fondo escenografía del Señor de los Anillos


La Paz vista desde El Alto

Pasamos allí dos días, pensando en irnos lo mas pronto posible hacia el soñado Titikaka al que tanto esperábamos llegar.
Pero una vez más el viaje decidió por nosotros por sobre nuestras propias elecciones. Esta, creemos, es la parte más divertida de vivir el momento, dejarse sorprender por lo casual.
Decimos que el viaje decidió por nosotros, porque justo antes de partir de La Paz, Sergio encontró en el aeropuerto un teléfono tirado.
Pasamos un par de horas recibiendo llamados e intentando ubicar a su dueño, hasta que dimos con él. El pequeño aparatejo y sus 600 contactos eran invaluables para Christian, a quien conocimos un rato después, cuando vino en busca de su móvil. Estaba tan agradecido por el gesto de devolverle el teléfono que insistió hasta el cansancio para poder retribuirnos con alguna ayuda.
Finalmente cargo nuestro tanque con nafta y y terminamos quedándonos de huéspedes por una semana más.

En el taller de maquinaria pesada de Christian (remera Roja)
Con Javier, Ignacia y sus dos pequeños hijitos, (caseros del taller de Christian) fanatizados con el mate argento.



Pasado este episodio y sus consecuencias seguimos camino hacia el lago sagrado.
El agua se presento por fin en su perfil más sublime, en forma de lago cristalino, y ya no cayendo del cielo incesantemente como los meses anteriores. El Titikaka nos cautivo en Copacabana durante 15 días. Quedamos casi inmóviles al borde de su orilla, entre eucaliptos y flores haciendo lo que a veces mejor nos sale hacer…nada…
La Isla del Sol y de la Luna están en el centro del lago, es imperdible conocerlas y a decir verdad nuestra visita por ellas fue demasiado fugaz. Razón suficiente para tener que regresar algún día.


...paz...


Atardecer en Copacabana, sin photoshop.


La Isla del Sol.


Por si no alcanzaba con los perros-burro del norte argentino, ahora tenemos los burro-oso




Oliverio te amamos!

Esto es vida.
Con más amigos de paso: Nicoletta y Massimo (Italia) con su Kombi "La Banana" recorriendo America haciendo teatro,  y Nico e Ine de Córdoba que tanto nos deleitaron con sus fotos y hermosa música.
¡Tenemos mascota! ¿Tenemos mascota?

Proximas novedades estaran llegando desde tierras peruanas. Hasta la vista!



9 comentarios:

  1. Al finnnnn!!!!! Como esperaba las fotos y la aventura chicos! Me encanta! Estoy re contenta! Besos a los dos! Abrazo enormeee!!!
    Ale.

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  2. Que bueno saber de ustedes!!!! me trajeron hermosos recuerdos de mi viaje a Bolivia y peru, las imagenes hermosas como siempre. Por mas que una quisiera saber de ustedes mas seguido, se re entiende que los tiempos ya no son los mismos...y esa es la idea de estos tipos de viajes!!! Nosotros, con mi compañero Ulises, comenzamos el mismo viaje que ustedes en Agosto, falta cada vez menos! Ojala nos crucemos en el camino! Vamos con nuestras mochilas, a descubrir una nueva vida!. Espero las cronicas peruanas, los abraza mucho....Agustina Bidinost!

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  3. hola chicos!!!!!!, me encanta lo q están viviendo , los felicito por la decisión!!!!!!!!!Adriana.......

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  4. como bien saben, ansiaba saber de uds!!! (aunque ya me habia quedado tranquila porque sabia que estaban bien...je!); super entendible su desaparicion, pero la verdad, es que me encanta entrar a ver que hay de nuevo por sus vidas! beso graaande para los dos (y para la gorda tambien!) y hasta la proxima entrada!Montse

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  5. Qué lindo leer de ustedes, y encima de Bolivia! La isla del Sol y toda la zona del lago, nos super cautivó cuando fuimos, y siempre pensamos en volver. Buenísimo que hayan coincidido con el carnaval de Oruro, es toda una experiencia! jaja! Un abrazo viajeros!

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  6. Hermosoooooooooo, todo las fotos los paisajes,los lugares tan nuevos para nosotros, y ustedes se los ve felices, se nota la estan pasando genial, les mandamos un beso enorme , enorme,de Lucia, Mora , Ro, Y miguel

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  7. Ey amigos! qué fotos tan pero tan lindas! los felicito, son únicas! Por donde andan? Nosotros en Estados Unidos hace ya un mes! se nos fundió el motor...estuvimos parados en San Diego re-armando todo! Ahora la Westy vuela...
    queremos tener noticias de ustedes!!! De nuevo, increíbles fotos!

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  8. Tenemos mascota.....? , dijo Augusto Monterroso..."y cuando despertó, el dinosaurio todavía estaba allí", dicen que es el cuento más corto de la literatura.... Muy buenas las crónicas, un gran abrazo, Marcelo.

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  9. Esta frase me encantó "Otra razón de este lapso silencioso se debe a que para nosotros la velocidad a la que corre el mundo ya no nos pertenece, y más que nada con lo que refleja nuestro viaje, como es este blog, no queremos hacerlo obligados ni presionados, si no que sea el espejo mas fiel de la sensibilidad y las emociones que nos va causando esta experiencia de vida"... EL MOMENTO PRESENTE. FLUIR SIN MÁS QUE FLUIR.

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